En algún rincon escondido se supone que me estabas esperando, por eso deambulé por las calles empedradas de la vieja ciudad a ver si por casualidad me tropezaba contigo.Por un instante creí hallarte al apoyarme en una baranda que se asomaba al infinito, pero unas luces que empezaban a brillar a lo lejos debieron espantarte - es lo que quiero creer - y en tu lugar sólo encontré el olor de tu cobardía y la fría huella de mi arrepentimiento...otra vez.
1 comentario:
Hacía días que te quería responder, pero siempre te leo en el curro y los comentarios los veo por correo. Pero en este caso el cliente que tentaba, me temo que acertó :P
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