viernes, 18 de mayo de 2012

"A lo tonto esto también es un relato"

Ni que yo fuera un intelectual, pero aquí estoy: intentando juntar cuatro líneas que tengan un poco de sentido. Amparado en la oscuridad y en el silencio de una sala de espera a las cuatro de la mañana, aguardo a que llegue la inspiración y por fin encontrar un tema sobre el que poder desarrollar una narración. Pero hoy las musas, si es que alguna vez me visitaron, se niegan a aparecer. Lo que si aparece es un tipo custodiado por varios policias gritando algo sobre no se qué de un espíritu reencarnado. Suena un timbre. Gente que acude. Cuatro y diez de la madrugada. Fin del relato.